"A veces, y solo a veces, ya no se que escribirte. Pienso que ni siquiera lees y si lo haces ya no te interesa más, al contrario creo que te estorba, que te molesta, que te quita tiempo, que te fastidio. Pero como hago para quitarme esa maldita costumbre?
Es que no te entiendo, no comprendo. Si en verdad te molesto entonces házmelo saber, sabré vivir aferrada únicamente a tu recuerdo como lo he estado haciendo durante todo este tiempo.
He perdido la cuenta de las noches enteras que llevo llorando tu ausencia, rezando tu nombre y cantándole al cielo todas tus canciones. Me dueles, me hieres, me muerdes, me destruyes, de ahogas, me destrozas. No es culpa tuya, claro que no. Tu no tienes culpa de haber seguido tu propia felicidad, de haberme olvidado, de haberme jugando una vez mas aunque yo te siga amando. Tu no eres culpable de no estar enamorado, tu no eres culpable de haberme arrancado el corazón.
Aquí la única tonta soy yo, por creer que en realidad yo significaba todo para alguien. La única que sufre soy yo, al escribirle y mandarle besos al aire. Si tan solo me explicaras y me dejaras como lo haz hecho sin avisar, tal vez me podría resignar. Pero eso si, jamas te podría soltar, olvidar, abandonar o dejar de amar y pensar. Estas metido en lo mas profundo de mi ser, estas clavado en todo lo que llevo dentro, estas presente en mis días y en mis noches, en mis tristezas, ilusiones y en todas mis acciones.
Me tienes en tus manos, pero ya no me acaricias, ya no me proteges, ya no me sientes, ya ni siquiera me quieres...me tienes entre tus dedos oprimiendo mis emociones, exprimiendo todas y cada una de mis expresiones; y no tengo ningún reclamo, ya que al final sea como sea, hiriéndome, olvidándome, odiándome o maldiciéndome me tienes ahí, en las palmas de tus manos mientras yo me aferro a un pasado que hasta ahora parece haber sido como un sueño, como un sueño del que hubiera deseado nunca tener que despertar."
0 comentarios:
Publicar un comentario